Comienza la temporada 2017 de rugby en gran parte del país, y hemos sido testigos de los resultados de las pretemporadas en los jugadores nacionales. Sin embargo, los referees también han hecho lo suyo. Es por eso que nuestros amigos Portal del Rugby conversó con 3 árbitros que, durante el verano, tuvieron acción al otro lado de la cordillera. Nos referimos a Luis Díaz, Frank Méndez y Tomás Fernández; quienes encabezaron la lista de árbitros de intercambio en Argentina.
La terna referil, presente en gran parte de los partidos de primera división Asociación de Rugby de Santiago (ARUSA) y test matches de los cóndores, comentó los aspectos fundamentales para progresar, tanto a nivel individual como colectivo, como jueces de rugby.
El referato en Chile.
No podemos desconocer que, en comparación con el país trasandino, el rugby chileno aún está un peldaño abajo; pese a ello, el trabajo que en el plano del arbitraje se está realizando en Chile nos da una luz de esperanza. Y es que, tal como menciona Frank, “las estructuras de organización del referato en Chile recién se están armando, en comparación a Argentina que posee una vasta experiencia internacional”. Esto se refleja en “la cantidad de referees que tienen y su estructura organizacional que, bajo la Unión argentina de Rugby (UAR), está en sincronía; hay personajes claves y directrices claras de crecimiento, sumado a una cantidad importante de partidos de alto nivel, lo que les permite proyectar una carrera en torno al arbitraje”, añade Tomás. Para Luis, Chile va en una curva ascendente, dado que “el trabajo que se realiza hace más de dos años, ha logrado capacitarnos mediante cursos, junto con un constante seguimiento de nuestros entrenadores”, quienes han logrado profesionalizar nuestra labor”.
El desafío del arbitraje internacional
Hablando del rugby argentino, los referees hacen hincapié en que no existen diferencias insuperables. “Sus jugadores están mucho más preparados en lo física, técnico y en lo reglamentario, lo que facilita el arbitraje”, señala Frank, agregando que “ellos buscan jugar por sobre todas las cosas”. Sin embargo, para Tomás, “hay muchos clubes chilenos que han disminuido la brecha, en base a entrenamiento duro y constante”. Díaz plantea que los trasandinos poseen “una fortaleza física y mental para logar mantenerse 80 minutos a una alta intensidad y dinamismo, lo cual te obliga a estar en perfectas condiciones”. No obstante, “en Argentina hay de todo tipo de jugador”, concluye Fernández, dando cuenta de que el desarrollo del rugbista chileno puede avanzar, si se trabaja con ahínco en los aspectos mencionados.
En líneas generales, Luis señala que, gracias a la experiencia internacional “hemos compartido con referees de gran nivel; tanto en Sudamericanos, Americas Rugby Championship, Seven de Viña del Mar, Torneo Valentín Martínez (Uruguay), Torneo Bicentenario (Argentina), entre otros”, esto les ha permitido “conocer otro tipo de juego que te lleva a dar el máximo; sin mencionar los muchos nuevos amigos, dentro y fuera de la cancha; otro mundo en torno al rugby” añade Méndez. Esto, gracias en gran medida al factor humano, dado que “te presentan a la gente del club, desde la directiva a los jugadores”, de forma que “te hacen sentir acogido y te agradecen el interés y la preocupación; sin mencionar los terceros tiempos…” cierra entre risas Tomás.
Ser un buen referee
Lograr insertarse en el alto rendimiento nunca ha sido fácil; ante ello Fernández es categórico: “si los jugadores se entrenan, ¿por qué nosotros no?”. Los tres árbitros concuerdan en que más allá del nivel físico o las cualidades del individuo, lo que hace la diferencia es el compromiso con la labor; “trabajar todo el año; incluso durante el verano, para así sumar la mayor cantidad de partidos que sea posible” nos aclara Frank, añadiendo que “ante todo, el compromiso, la responsabilidad, y el profesionalismo; ya sean partidos de primera, juveniles, desarrollo o seven, son la clave para sumar experiencia dentro y fuera de la cancha”. Luis agrega parte de su cotidianeidad, señalando que las capacitaciones son solo el primer paso, “luego vienen las evaluaciones con objetivos a mejorar semana a semana, y parar lograrlo es fundamental preparar el partido, ya sea revisando videos de los equipos que se enfrentan, determinando los estilos de juego, la vestimenta a utilizar, u ordenando tu bolso la noche anterior”. Fernández concluye que “una buena base física, compartir discusiones con nuestros pares, trabajar duro estudiando el reglamento y, por sobre todo, humildad ante la crítica constructiva, trae como consecuencia mejorar”.
A modo de cierre, vemos que el referato nacional va por un buen camino, ya que, tomando las palabras de Frank, “existe un grupo bastante grande, invirtiendo mucho tiempo y ganas en el trabajo; abarcando todos los ámbitos que nos conciernen”, lo que Luis profundiza mencionando que “debemos trabajar en crear un ambiente único de respeto, donde quién dirija, sienta la confianza de no ser reprochado desde fuera o dentro de la cancha”. Tomás concluye que la comunidad rugbier chilena debe hacer del arbitraje una práctica enriquecedora, motivando a todos los referees a dar lo mejor de si, “de esta forma, podremos sumar a más gente a disfrutar el rugby desde otro punto de vista, desde el lugar más privilegiado, la cancha”.
Nota: Giovanni Quintrel vía www.portaldelrugby.com
Me gustaría realizar un curso de arbitraje… pero no sé dónde ni cuándo hacerlo, he buscado en muchas partes pero nada hasta ahora les agradezco cualquier información al respecto.! Gracias desde ya.!
Hola Eduardo, lamentablemente quienes son los encargados de dictar cursos es la federación de rugby de Chile y Arusa. Estos cupos siempre son complicados de conseguir ya que tienen alta demanda y pocos cupos.
Te recomiendo que puedas ver laws de World Rugby, para empezar a formalizar conocimientos
http://laws.worldrugby.org/?language=ES
Un abrazo