Con miras en la reactivación del rugby en la región, ya se empieza a pensar en la Super Liga Americana de Rugby y en cómo abordar una temporada 2021 de la competencia que trae el profesionalismo de la disciplina ovalada a Sudamérica.
Un abrupto final tuvo en marzo la SLAR que, si bien tenía 10 fechas regulares calendarizadas, solo 2 de estas pudieron llevarse a cabo antes de que las restricciones sanitarias, producto del COVID-19, se hicieran presente. Los números que para un incipiente inicio mostraba la liga, eran muy positivos y prometedores, tanto para la región, como para las uniones participantes a través de sus 5 equipos (6 en el caso de contar a Colombia que se uniría posteriormente a la competencia).
Más de 6 meses han pasado desde aquel sueño del rugby profesional en la región y hoy, con el Sudamericano 4 Naciones a poco menos de un mes, es que vuelve a ponerse en la palestra una posible reactivación de la SLAR, que podría eventualmente aprovechar el envión y situarse como la principal competencia de rugby en la región.
De cara a una próxima temporada, varias tentativas se manejan en la interna de la liga. Por lo pronto se espera que, como se tenía planeado originalmente, Cafeteros Pro se una como el sexto equipo regular en la liga, teniendo en cuenta sobre todo su plan de expansión que hoy por hoy se está realizando en Colombia. De esta forma, la competencia tendría a las franquicias de Cafeteros Pro, Corinthians (Brasil), Ceibos (Argentina), Olimpia Lions (Paraguay), Peñarol (Uruguay) y Selknam (Chile).
Más allá de las especulaciones, Argentina tuvo varios acercamientos, considerando la problemática originada tras la falta de competencia para Jaguares, su franquicia del Super Rugby. Si bien existen posibilidades para que el equipo argentino pueda participar en Australia, Nueva Zelanda o Sudáfrica, los recursos que significa “radicarse” en el extranjero para poder participar de los torneos locales, harían prácticamente inviable una incursión argentina en la reactivación del rugby del hemisferio sur. Ante ello, se plantea que Jaguares podría convertirse en una franquicia bonaerense, generando así una “disputa” local frente a los cordobeses de Ceibos. No obstante, la diferencia de nivel de juego del equipo que participó en el Super Rugby y, en vista de controlar el éxodo de jugadores argentinos, haría que también se planteara abiertamente que el plantel de Jaguares constituyese un pool de jugadores elegibles para las distintas franquicias que componen la SLAR. Por parte de Ceibos, se ratificó que su posible participación en la Major League Rugby (MLR) quedaba fuera de lugar, una vez que se oficializaron los 13 equipos norteamericanos en competencia de cara a su próxima temporada.
Por el lado chileno, Chile Rugby a través de su presidente Cristian Rudloff, confirmó que existen planes para una segunda franquicia que se sumaría al cuadro de Selknam pero que estos se pospondrían para una próxima temporada, dado el impacto de la actual pandemia en el plan de desarrollo del Alto Rendimiento en territorio nacional. Esto se debe a que el actual foco de la federación chilena se encuentra en potenciar una estructura de trabajo de primer nivel, que permita extender la cobertura del Alto Rendimiento de manera tal de poder facilitar la preparación de deportistas de élite a lo largo del extenso territorio chileno. Actualmente, Viña del Mar y Concepción estarían confirmados como los centros próximamente a ser habilitados para dicho fin, en conjunto con un tercer centro que debería situarse en Arica/Antofagasta. En vista de esto, una segunda franquicia chilena podría tener una impronta nortina o sureña, lo cual aportaría directamente en la descentralización del rugby nacional.
En otras posibles adiciones a la franquicia, tentativamente se manejan planes para una segunda franquicia brasileña, con sede en Florianópolis, y una uruguaya ligada a Club Nacional. Desde fuera de la región, se ha hablado de la incorporación de franquicias mexicanas, españolas o portuguesas, de las cuales aún no se cuenta con información oficial por parte de las entidades correspondientes.
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